Absa dejó un "desastre" en la vereda de un jubilado: un pozo de 2 metros y el temor a que la tierra ceda

Una situación compleja atraviesa una pareja de personas mayores, que esperan una inmediata respuesta ante la inacción de ABSA. Según indicaron al Whatsapp de Diario EL DIA (221 477 9896), todo comenzó con el descubrimiento de un pozo de casi dos metros de profundidad en la puerta de su casa, ubicada en 19 entre 63 y 64. 

Meses atrás, aprovechando un arreglo de la casa de los afectados, el dueño pidió al albañil arreglar una baldosa floja de la vereda, por miedo a un accidente. Cuando el trabajador observó el panorama, descubrió “que debajo de la baldosa había un pozo de unos dos metros de profundidad”. 

Así, comenzaron las gestiones “con el Municipio y ABSA para que revisaran”. Lejos de solucionar el inconveniente, operarios de la empresa privada “vinieron y agradaron el pozo. La situación terminó con media vereda detonada y un pozo de unos cuatro o cinco metros de profundidad”.

Los mismos trabajadores de ABSA le informaron que “literalmente la vereda estaba sostenida por las raíces de los árboles que se agarraron entre sí. Taparon todo con tablones y maderas, se fueron y nunca más volvieron”. Los reclamos (ABSA nº 3880700 y Autoridad del Agua nº RECABSA-002928) comenzaron el 29 de abril al 147: “El 9 de mayo vino una patrulla municipal e informó a ABSA, que vinieron y vallaron el lugar. El 23 de mayo vino ABSA y profundizó el pozo. Vinieron el 27 de mayo y ya no volvieron más”. 

Ante la insistencia, desde la empresa proveedora del servicio le confirmaron que tenían sus reclamos asentados pero que “ni siquiera había orden de trabajo en la calle” y, por más que denunciara, eso “tampoco iba a servir”: “Me dicen que puede tardar entre un año y dos”. 

La desesperación aumentó cuando, días atrás, en la misma vereda “un auto subiendo a una cochera cayó en un pozo cuando la vereda cedió, a dos metros de donde está el pozo”.