Buscando aumentar la ola

“Gestión, gestión, gestión”, dicen en ámbitos del gobierno nacional y provincial sobre los días que vienen hasta el 22 de octubre. Y, replicado, la frase se repite en los ámbitos municipales. Acrecentar la ola es el objetivo, la ola después del favorable resultado de las PASO en nuestra ciudad que posicionó a Cambiemos según el escrutinio provisorio 16 puntos por encima del kirchnerismo. En los dos meses que separan esta instancia de las generales, los cambios y ajustes en el desempeño del gabinete local, fundamentalmente en las áreas más débiles, caminan en ese sentido.

La renovación de delegados fue uno de los puntos de esta lista, que, curiosamente, se hizo justo en el filo de los comicios del pasado domingo. Los referentes comunales de Villa Elisa, City Bell y Arturo Seguí fueron reemplazados por tres nuevos dirigentes. No cambió el conductor político del corredor Norte, el senador Juan Pablo Allan, que se afianzó en influencia en el gabinete, pero sí se ajustaron nombres para “oxigenar” la gestión y darle un nuevo énfasis.

También de cara a octubre la mesa chica del gabinete del Intendente analizó con detenimiento fortalezas y debilidades. Y, viendo al tope de los reclamos vecinales la crítica situación del bacheo y el mantenimiento de luminarias, estas dos funciones fueron transferidas a la secretaría de Espacios Públicos. Hasta ahora pertenecían a Obras y Servicios Públicos.

En ese área, con fondos de origen nacional y provincial, en agenda hay pavimentaciones y mejoras que el gobierno de Garro quiere apurar en función de los tiempos políticos para mostrar al electorado cambios sustanciales, aunque muchas aún estén en pañales.

El jefe comunal analiza el próximo llamado al electorado y aguarda migración de votos que se deriven a Cambiemos y a Unidad Ciudadana, en virtud de la polarización que se profundiza entre estas dos fuerzas. Así lo habló con la gobernadora María Eugenia Vidal, luego de acompañarla en su primera aparición pública post electoral en la planta potabilizadora de ABSA.

Asimilando resultados para poder replantear estrategias. En eso está el kirchnerismo, luego de que Unidad Ciudadana obtuviera en La Plata una participación en las PASO mucho más baja que la esperada por ese sector. Con poco más de 23 puntos, según el escrutinio provisorio, los dirigentes alineados a la ex presidenta Cristina Fernández analizan cómo mejorar la instancia de agosto llegando al electorado con mensajes que más allá de implicar consignas contra el “ajuste” económico levanten propuestas para los vecinos de la Ciudad.

El kirchnerismo ha realizado una elección pobre, por debajo de sus propias expectativas. Hay quienes creen que parte de esa performance obedece a cuestiones de una lógica de construcción que volvió una vez más a fallar y que no pudo seducir a una mayoría de platenses.

No pocos dirigentes peronistas apuntan a Máximo Kirchner, quien tuvo el control de la lapicera para el armado de la lista. La insistencia en poner al tope a candidatos poco taquilleros privilegiando la lógica interna K, generó, más allá de los ruidos internos, que el electorado independiente le diera una vez más vuelta la cara a la propuesta que esta vez llevó el rótulo de Unidad Ciudadana.

A esa elección modesta para el armado kirchnerista bien pudo haber contribuido el clima de tensión que nunca logró distenderse. La sorda disputa entre Florencia Saintout y Victoria Tolosa Paz fue un factor que rodeó la campaña electoral rumbo a las PASO.

Visiblemente enfrentadas, en muchas ocasiones evitaron fotos conjuntas y compartir actividades, como si se tratara de candidatas de listas distintas. Y esa erosión recíproca que tiene que ver con la intención de ambas dirigentes de ir por la Intendencia en 2019, terminó por socavar los cimientos de una lista que ahora afronta el desafío de levantar sus acciones en un escenario electoral que le asoma adverso.