El sistema no daría abasto si todos consultaran como se debe

Hay dos situaciones por las cuales los chicos son llevados al médico: cuando están enfermos y para realizarse algún control de salud. Y en la práctica se ve que este último caso es más bien excepcional. En nuestro país los controles de salud de niños sanos están muy por debajo de lo que se recomienda. Y eso se debe en parte a que tampoco hay políticas dirigidas a los padres para promover la medicina preventiva y los controles en forma regular.

Pero lo cierto también es que si todos realizaran los controles preventivos que se recomiendan para evaluar el crecimiento, los dispositivos de consulta para el control de niños sanos estarían desbordados. Con los recursos humanos y la infraestructura que cuentan actualmente los hospitales y centros de salud apenas si dan abasto para atender las consultas de demanda espontánea por enfermedad. De hecho, para hacer un control de rutina muchos centros de salud hoy están dando turno recién para dentro de un mes.