Macri con su segundo libro, entre “progres” e interna

Con escasa presencia del radicalismo, Mauricio Macri presentó su segundo libro, “Para qué”, en el que expuso su centralidad dentro del PRO, dejó por sentado que el país requiere “girar violentamente” a un esquema de rápidas reformas y volvió a jugar con la “ambigüedad” respecto a si será o no candidato el año que viene. “Ningún progre nos puede correr más”, fue una de las frases más altisonantes de una presentación en la que se lo vio relajado y confiado que en 2023 Juntos por el Cambio (JxC) retomará el mando de la Casa Rosada.

Frente a un auditorio de unas 1.500 personas que pobló una de las salas de La Rural, el expresidente ingresó al son de “Back in Black” de AC DC, lo que lo emparenta al estilo del libertario Javier Milei (sube a los escenarios bajo el sonido estridente de La Renga), a quien le envió ciertos guiños con un discurso que gira “a la derecha” de la agenda de JxC.

Es que el ex presidente volvió a decir que Argentina debe “girar violentamente al mundo de los confiables” en referencia a los cambios rápidos que debería efectuar en temas previsionales y laborales una eventual nueva administración de la coalición opositora.

Además, insistió en la necesidad de privatizar Aerolíneas Argentinas, entre otras empresas públicas. “Donde mierda están las prioridades”, enfatizó, al cuestionar los “privilegios” de sindicalistas del sector aéreo que se beneficiarían con la operatoria de la aerolínea de bandera.

En la platea escuchaban los diputados radicales Mario Negri, Martín Tetaz y el cordobés Rodrigo de Loredo, que se ubicó junto a Juliana Awada. Pero no estaban presentes los principales dirigentes del centenario partido como Gerardo Morales, Martín Lousteau y Facundo Manes. El neurólogo a esa hora se encontraba “con una actividad militante” en La Boca.

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En realidad, en el radicalismo hay cierta incomodidad con los planteos extremos que viene realizando Macri. Y algunos consideran que detrás ese rol de armador y “DT”, como insinuó ayer, el expresidente está preparando el terreno para intentar un “segundo tiempo” en Balcarce 50.

Lo cierto es que durante el encuentro de la víspera hubo rostros de cierta incomodidad tanto en los representantes de la UCR como de la Coalición Cívica, como los diputados Maxi Ferraro o Juan Manuel López. También, por momentos, se lo vio tenso a Horacio Rodríguez Larreta que sí apareció en los videos con testimonios elogiosos hacia Macri que se transmitieron durante el evento. El primer homenaje fue el del exmandatario colombiano Alvaro Uribe, uno de los “halcones” que décadas atrás rivalizaba con los presidentes de la “Patria Grande”.

El expresidente volvió a nombrar los apotegmas de la gestión de Cambiemos, “somos el cambio o no somos nada”, por caso y emprenderla contra el “populismo” al que asimila al “facilismo”. Se mostró muy crítico con el gobierno de Alberto Fernández y aventuró un futuro “difícil” para quien vaya a tomar el control del Ejecutivo durante el año próximo.

En ese sentido, aseguró que “2023 no va a tener nada que ver con 2015, todo cambia muy rápido” y remarcó que habrá “una bomba 100 veces peor que la de 2015”.

Con Larreta, Patricia Bullrich y María Eugenia Vidal presentes, se refirió a la interna PRO para dirimir al candidato a presidente. Y ahí volvió a cuestionar el “cambio con concesiones o cambio con límites” al que parece asimilar a la propuesta electoral del alcalde porteño.

Pareció, de alguna manera, instarlos a “competir” y aseguró que en Argentina no se está acostumbrado a este tipo de disputas que “nos hace mejores”. Con todo, no hubo un rechazo taxativo a una nueva candidatura presidencial.

Un dirigente radical consultado sostuvo que con este protagonismo, Macri busca instalar una futura candidatura y que por algo “adelantó” la presentación de su segundo libro que estaba prevista para diciembre próximo. Si llegara a confirmarse una nueva aventura presidencial del fundador del PRO, quedaría herida de muerte JxC como herramienta electoral, especuló la fuente consultada.