Nadal liquidó a Schwartzman e hizo “polvo” el récord de John McEnroe

Rafael Nadal venció a Diego Schwartzman 6-3 y 6-4 con lo que alcanzó los cuartos de final del Mutua Madrid Open y de paso superó los 49 sets ganados de manera consecutiva por John McEnroe en 1984, récord en la Era Abierta. En el caso del estadounidense fue sobre carpeta; mientras que el mallorquín sigue dominando en polvo de ladrillo. Claro que la de ayer ni fue una jornada propicia para los argentinos, ya que Juan Martín del Potro y Leo Mayer también le dijeron adiós al torneo de la capital española.

Más preciso que en el partido anterior contra el francés Gael Monfils, a Nadal le sirvió su poderío desde el fondo de la cancha para desbaratar la defensa de “El Peque”, y derrotarlo por quinta oportunidad en el circuito profesional y segunda este año (antes había sido en el Abierto de Australia).

Nadal solo cedió una vez su saque ante el discípulo de Juan Ignacio Chela (octavo juego del segundo set), cuando el argentino lució suelto, con un poderoso revés paralelo para inquietar al cinco veces ganador de este torneo.

Pero “El Peque” no pudo confirmar ese momento y cedió su servicio en el noveno juego de ese parcial ante la tenacidad de Nadal, que confirmó su victoria a continuación en una hora y 44 minutos.

Una vez desplazado de su camino Schwartzman, Nadal se medirá en cuartos contra el austríaco Dominic Thiem, a quien derrotó en la final del pasado año en la Caja Mágica, y luego después en las semifinales de Roland Garros y hace unas semanas, en los cuartos de Montecarlo, le infligió un duro castigo: 6-0 y 6-2.

Thiem venció en octavos al croata Borna Coric por 2-6, 7-6 (5) y 6-4 y después se mostró tranquilo ante su reto contra Nadal.

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“Jugar ante Rafa Nadal en polvo de ladrillo es el mayor desafío que existe en el tenis en estos momentos. Es muy complicado poder vencerle, pero tengo que pensar que voy a ganar el partido. Tengo mis posibilidades y soy optimista con un buen papel”, dijo el austríaco.

“Le planté cara en la final y estuve a punto de poder dar la sorpresa, pero fue en Roma donde pude vencerle. Creo que allí hice uno de mis mejores partidos de mi carrera deportiva”, recordó.

“La clave para ganar a Nadal está en jugar muy agresivo sin cometer muchos errores. Si a esto le sumas que él no tenga su día, hace que las probabilidades de ganar sean mayores. Creo que el año pasado tenía más fácil el poder ganarle que este año”, admitió.

A todo esto fue un mal día para el tenis argentino que había colocado a tres de sus representantes en los octavos de final, porque Juan Martín del Potro cedió ante el virtuoso revés a una mano del serbio Dusan Lajovic, 95 del mundo y de la fase previa (3-6, 6-4, y 7-6), y Leonardo Mayer ante el alemán Alexander Zverev por 6-4 y 6-2.

“He jugado dos partidos aceptables, pero tengo mucho por mejorar y tengo que aumentar aún más mi nivel”, razonó Del Potro. “En general, tengo que mejorar un poco más todo mi juego. El final estaba todo bajo mi control, pero fallé tres derechas fáciles en un tie-break y eso es mucho”, admitió al recordar el 4-0 con el que liberó ese juego corto.

Ni un solo punto de rotura hubo en la victoria de John Isner ante el uruguayo Pablo Cuevas (6-7, 7-6 y 7-6), firmada por el gigante estadounidense con 32 saques directos y próximo rival de Zverev.

El otro cuarto de final lo disputarán el sudafricano Kevin Anderson verdugo del alemán Philipp Kohlschreiber (6-3 y 7-6) y el británico Kyle Edmund que se deshizo del belga David Goffin (6-3 y 6-3).

En el cuadro femenino hicieron las maletas dos ex campeonas, la rumana Simona Halep, ganadora en los dos últimos años, que cayó ante la checa Karolina Pliskova (6-4 y 6-3) y la rusa Maria Sharapova, triunfadora en 2014, ante la holandesa Kiki Bertens (4-6, 6-2 y 6-3).

Bertens noqueó a la jugadora siberiana en dos horas y cinco minutos, y se medirá en la penúltima ronda contra la francesa Caroline Garcia, verdugo de la española Carla Suárez, por 6-2 y 6-3.

“Debo ser un poco dura conmigo misma y esperar un poco más de mi. Esa es la única forma de mejorar”, admitió Sharapova.