Junín: denuncian la muerte de un jubilado que esperaba un marcapasos de PAMI

Raúl Pascual Canzonetta, de 76 años, murió tras permanecer internado varios días en el Hospital Interzonal General de Agudos “Abraham Piñeyro” de Junín a la espera de un marcapasos definitivo que el PAMI no entregó. Su hijo, el periodista Matías Canzonetta, expuso el caso en una entrevista con TeleJunín y responsabilizó al organismo por la falta de insumos críticos.

El paciente, que no tenía antecedentes cardíacos, se descompensó el 21 de agosto y fue trasladado de urgencia al hospital, donde confirmaron que sufría un bloqueo cardíaco severo. Tras los primeros estudios ingresó a terapia intensiva.

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“Mi viejo no tenía antecedentes cardíacos, nada. El 22 de agosto entró en terapia y le colocaron un marcapasos provisorio para que el corazón siguiera funcionando hasta colocar el definitivo. Aun así, tuvo dos o tres episodios en la madrugada del viernes y del sábado. Quiero agradecer al equipo del hospital, que hicieron todo lo posible, como mecánicos de corazón, aguantando hasta el último minuto para darle cada día una oportunidad”, relató Canzonetta.

El viernes, los médicos habían solicitado el dispositivo definitivo de modelo DDDR, pero les informaron que no había stock en Junín ni en la sede central de insumos de PAMI en Mataderos. “Así nos agarró sábado y domingo, quedamos acéfalos, buscando a alguien con quien hablar para apurar el tema. La salud no entiende de horarios ni de días, y sin embargo así fue la crudeza de la situación”, denunció.

Recién el lunes 25 de agosto, tras gestiones personales, Canzonetta recibió autorización para retirar un marcapasos alternativo en Mataderos al día siguiente. Sin embargo, el tiempo se agotó. “Ese lunes hablé con mi viejo y le mentí, le dije que ya lo tenía para darle tranquilidad. Pero en la madrugada del martes, mientras nos preparábamos para salir a buscarlo, a la una de la mañana sonó el teléfono de terapia: mi papá había hecho un paro y había fallecido”, contó.

El periodista cuestionó con dureza la falta de un stock mínimo de insumos. “Es alarmante que no haya marcapasos en la ciudad para una patología frecuente, considerando la cantidad de afiliados que tiene PAMI. Los propios médicos y enfermeros se sorprendían de que no hubiese ninguno”, expresó.

En ese sentido, advirtió que la situación refleja un problema estructural: “Esto es una ruleta que atraviesan cientos de ‘Raúles’. Es increíble que no haya un backup. Si hoy le pasa a otro jubilado, ¿qué ocurre? ¿A quién se le pregunta: al hospital, a PAMI, a las clínicas? Hay una obligación, hay leyes, pero en la práctica no está claro”.

Si bien ya inició acciones legales, Canzonetta remarcó que la pérdida es irreparable: “Mi viejo no me lo devuelve nadie. Muchos me escribieron después con la misma inquietud: qué pasa en una emergencia, con miles de jubilados en la ciudad. Esta vez le tocó a mi viejo”, sostuvo.