Franco Colapinto: convierte los sueños en una auténtica realidad

Celestial lo hecho por Franco Colapinto, ya que con apenas dos carreras en la Fórmula Uno, ya consiguió clasificar entre aquellos pilotos que suman puntos. El joven piloto argentino se quedó con la octava colocación del Gran Premio de Azerbaiyán, en el difícil trazado del circuito callejero de la ciudad de Bakú, que terminó teniendo como ganador a Oscar Piastri (McLaren).

Mucho debió trabajar Colapinto con su Williams para poder conquistar los primeros cuatro puntos en el actual campeonato de pilotos de la F1. La construcción del enorme resultado comenzó en la clasificación del sábado, cuando se aseguró el noveno lugar de partida al meterse en el Q3, todo en apenas su segunda carrera en la categoría; mientras que ayer se encontró con la novedad de la noticia de que finalmente partiría octavo tras la penalización que sufrió Lewis Hamilton por el cambio de su unidad de potencia.

La carrera fue durísima, para todos. Claro, aún más para un piloto que llegó de apuro a la F1 para reemplazar a Logan Sargeant, que debió acostumbrarse a un auto de la máxima categoría cuando la temporada ya había pasado la mitad de su agenda de 2024 y, para agregar algo más, correr en un callejero difícil como el de Azerbaiyán. Colapinto tuvo que administrar la degradación de los neumáticos, mantenerse en ritmo y evitar los muros. Y casi todo se fue cumpliendo.

El argentino se había mantenido en zona de puntos durante gran parte de la carrera, pero sufrió un fuerte bajón en la parte media de la competencia porque no logró poner en su punto ideal a los neumáticos duros. “Se notó eso que me faltaba que no sé administrar bien, no pude meter en temperatura los duros”, confesó Colapinto después de la carrera. Esa caída de ritmo lo dejó undécimo, tras perder con Nico Hülkenberg la posición y parecía que la sangría no pararía. Sin embargo, ahí cambió el andar de su FW46.

A partir de la vuelta 30 apretó el ritmo. En cinco giros consecutivos bajó su registro para contener el ataque de Lewis Hamilton, quien venía atrás con un ritmo superior. Pero no pudo contra el Williams del argentino cuando llegó a poner en el momento justo a los neumáticos. “Cuando lo vi atrás, pensé en tratar de dejarlo ahí. Si no sumaba puntos ya era un logro”, dijo.

Con ese ritmo que imprimió en el último segmento de la carrera, logró descontarle a Hülkenberg la ventaja que había logrado y lo superó con claridad para meterse décimo. Hasta ahí, ya era un enorme resultado, terminar en los puntos en su segunda carrera.

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Aunque en el cierre tendría un “regalo” más. El tremendo accidente entre Carlos Sainz y Checo Pérez en plena pelea por el tercer puesto dejó a los dos experimentados pilotos fuera de competencia y Colapinto saltó al octavo lugar, para asegurarse cuatro puntos.

El argentino llegó para reemplazar a Sargeant, quien en 36 carreras apenas anotó una unidad. Y no la consiguió en pista. Fue en el GP de Estados Unidos de 2023, donde el estadounidense había terminado 12, pero avanzó dos puestos tras la descalificación de Leclerc y Hamilton.

“Pensé que iba a ser complicado terminar en los puntos. Pero tener los dos coches dentro de los ocho mejores es una locura. Estoy muy feliz. Es un sueño hecho realidad. Contento por el equipo, estar en los puntos con los dos autos en mi segunda carrera. Estoy demostrado que la confianza que me dieron está bien y estoy devolviendo todo con el ritmo, estoy en tiempos parejos con Alex (Albon). Es solo mi segunda carrera, es el comienzo y vendrán muchas más”, dijo Colapinto tras la carrera.

Con el cambio de piloto, Williams buscaba meterse seguido en la zona de puntos para escalar en el Mundial de Constructores. Con los diez que se llevaron de Bakú (Albon fue séptimo) ya superaron a Alpine, avanzaron al octavo lugar está a 13 de Haas, que solo se llevó uno de la mano de Oliver Bearman.

El piloto argentino va ganando confianza y devuelve con creces la que depositaron los popes del team de Grove en él. Sin mucho tiempo de recuperación, el fin de semana Colapinto estará otra vez en pista en el tortuoso trazado de Singapur, un lugar complicado, donde hay muchas curvas, hace calor, hay mucha humedad. Pero después de lo que logró en Bakú, todo es posible.

Franco Colapinto al comando de su Williams transitando el complicado circuito de Bakú, que dio lugar al GP Premio de Azerbaiyán de F1 / AFP

 

 

 

 

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