En las tribunas se vivió un gran espectáculo para el recuerdo

A veces los resultados no impiden que los hinchas puedan ofrecer una verdadera fiesta en un estadio de fútbol. Eso fue lo que se vivió anoche en UNO, en la derrota de Estudiantes a manos de Aldovisi, en lo que fue la última fecha del torneo. Pese a eso el Pincha se regaló una noche para recordar, porque sus hinchas armaron todo lo necesario como para agradecerles a los jugadores la clasificación a la próxima Copa Libertadores. Antes, durante y después hubo una fiesta pensado y ejecutada a la perfección. Sólo faltó que el equipo repitiera en la cancha lo realizado en las fechas anteriores.

El primer detalle de la noche fue la buena respuesta de los hinchas, que respondieron al pedido de los dirigentes y concurrieron temprano al estadio, para sumar más puntos en el ranking y, de paso, ayuda a que no haya aglomeraciones en los ingresos. Una buena iniciativa que en el próximo torneo podría ser acompañada con alguna actividad. Alguna vez fue la Reserva, ahora podría ser algún otro tipo de partido.

En la cancha la fiesta se palpó en el ambiente desde temprano. Sonrisas, comentarios referidos a la clasificación a la Libertadores y una alegría extra por haber revertido el resultado en el clásico, que además de estirar la racha le permitió asegurarse el pasaporte a la Copa.

La salida del equipo fue impactante. Cuatro telones, bombas de humo y fuegos artificiales. Todo estuvo permitido en un partido donde se sabía que los tres puntos poco valían a la hora de la cosecha. Por eso esta vez eso de festejar antes de tiempo estuvo aceptado.

De repente las luces de UNO se apagaron por completo y los hinchas, con celulares en mano, iluminaron las tribunas con los colores rojo y blanco. Un espectáculo maravilloso que debe ser imitado por todas las parcialidades del fútbol argentino.

En ese ambiente tan alegre y festivo llegó el reconocimiento para Martín Palermo, el ahora técnico de Aldosivi y ex jugador de Estudiantes en una época de vacas flacas. Allá por 1994/98 el Loco se cansó de hacer goles y fue la bandera de un grupo que resurgió. Luego de algunos vaivenes con los hinchas llegó la merecida reconciliación. “Paleeeeermo, Paleeeermo”, se escuchó desde las cuatro tribunas. El propio Juan Sebastián Verón, antes protagonista de la “ruptura”, anoche le entregó una plaqueta en mano junto al presidente Martín Gorostegui.

Bombas de humo, fuegos artificiales y mucho color / Dolores Ripoll

OTRO HOMENAJE A SABELLA

En el entretiempo hubo un momento para recordar a Alejandro Sabella, de quien se cumplió un año de su fallecimiento durante la semana.

Para eso se apagaron las luces del estadio y por la pantalla grande se pasaron imágenes y momentos inolvidables del exjugador y entrenador del Pincha, que falleciera luego de una larga enfermedad para dejar un vacío muy importante.

Como era de esperar la multitud hizo silencio y coreó su apellido durante un largo rato. Sabella estará siempre en el corazón de los hinchas.

Si de homenajes se trató, el primero en sentir el cariño de los hinchas fue Juan Carlos Rulli, quien en 1965 convirtió un gol ante Lanús que le permitió al Pincha mantener la categoría. También él fue recordado por los hinchas del León.

GONZÁLEZ PIREZ NO SE LO PERDIÓ

Entre los hinchas que estuvieron en las tribunas y plateas no pasó desapercibido Leandro González Pirez, el defensor que tuvo un paso entre 2015/16 y logró un vínculo especial. Siempre dijo que fue el club donde mejor se sintió y algún día volverá. ¿Será para jugar la Libertadores? Muy pronto todavía.

DEBUTÓ AARON SPETALE

En el partido de anoche ante Aldosivi se produjo el debut en Primera de Aaron Spetale, el delantero categoría 2000 que tuvo un gran torneo en el equipo que dirige Pablo Quatrocchi. De hecho ayer fue titular en el empate ante el Tiburón.

Y otro jugador que no venía teniendo minutos y anoche jugó bastante fue Franco Romero, quien curiosamente había debutado contra Aldosivi cuando el entrenador Pincha era Leandro Desábato.

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